Hasta ahora, la única forma de eliminar rápidamente la pap ada era la cirugía estética, es decir, la liposucción de papada. La tendencia actual es utilizar la radiofrecuencia para reducir la papada. Se trata de una posibilidad que ofrece la medicina estética, que permite eliminar el exceso de grasa sin recurrir a la cirugía.

¿Qué es la papada?

La papada es un exceso de grasa acumulada bajo el mentón. Una desgracia que se observa en las familias y que parece transmitirse de una generación a otra. Sin embargo, la papada también puede deberse a un aumento importante de peso. Para deshacerse de ellos, fue necesaria una liposucción. Pero hoy se pueden hacer cosas sencillas que permiten acortar no sólo la duración de la operación, sino también el periodo de recuperación.

La solución de radiofrecuencia

En el contexto de las técnicas no invasivas para eliminar el exceso de grasa, la radiofrecuencia no es la única solución que ofrece la medicina estética. También existe la carboxiterapia, terapia láser de baja intensidad o láser frío, que puede utilizarse para erradicar la papada. Sin embargo, la radiofrecuencia ocupa un lugar destacado en la medicina antienvejecimiento. Se trata de una técnica para tratar la flacidez de la piel.

Utilizar el calor para destruir la grasa

Sin embargo, la radiofrecuencia nos interesa especialmente porque es una técnica de destrucción de la grasa por calor. Gracias a las ondas electromagnéticas que emite a alta frecuencia, produce calor en los tejidos subcutáneos, sobre todo en la dermis y la hipodermis, para quemar las células grasas. La temperatura en el fondo puede variar entre 55 y 65°, lo que naturalmente conduce a la destrucción de las células grasas. Pero en la superficie, esta temperatura puede ser inferior a 42°, lo que hace de la radiofrecuencia un procedimiento indoloro.

Una técnica para muchos beneficios

Además de quemar la grasa superflua localizada en el mentón, la radiofrecuencia permitirá tratar la piel en profundidad, estimulando la producción de colágeno. Esto tendrá el efecto beneficioso de reafirmar y tensar el tejido cutáneo. Por eso la radiofrecuencia es tan popular en la lucha contra el envejecimiento. Permitirá tratar la flacidez de la piel del óvalo facial, el cuello, el escote, la cara interna de los muslos y los brazos, así como el vientre.

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